Desempleo en el Paraíso. La realidad oculta de BCS

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FOTOS: Internet.

Vientos de Pueblo

José Luis Cortés M.

 

San José del Cabo, Baja California Sur (BCS). BCS, un estado que brilla por su belleza natural y su creciente industria turística, enfrenta un desafío que se oculta tras el esplendor de sus playas: el desempleo. A pesar de que las cifras oficiales apuntan a una tasa de desocupación relativamente baja, del 2.41% en el segundo trimestre de 2024, la realidad del mercado laboral es mucho más compleja y revela un panorama lleno de contradicciones y desigualdades.

La población económicamente activa (PEA) en la entidad asciende a aproximadamente 467 mil 275 personas, de las cuales 456 mil están ocupadas. Sin embargo, detrás de estos números se encuentra una alarmante tasa de informalidad laboral, que alcanza el 36.9%. Esto significa que una gran parte de los trabajadores carece de acceso a prestaciones sociales, seguridad social y estabilidad laboral. En este contexto, la precariedad se convierte en la norma para muchos sudcalifornianos.

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Omar Antonio Zavala Agúndez, secretario del Trabajo, Bienestar y Desarrollo Social de BCS, ha destacado que la baja tasa de desempleo es resultado de la colaboración entre el gobierno y el sector empresarial. Sin embargo, esta colaboración no parece haber logrado abordar las necesidades de los sectores más vulnerables. Los jóvenes recién egresados enfrentan un mercado laboral que no les ofrece oportunidades adecuadas a su formación, mientras que los adultos mayores son a menudo excluidos de un sistema que parece haber olvidado su valía.

La llegada constante de trabajadores provenientes de otras entidades del país ha creado un “mercado flotante” en BCS. Muchos llegan con la esperanza de encontrar empleo temporal, pero se ven obligados a marcharse rápidamente en busca de mejores oportunidades en otros lugares. Este fenómeno no sólo refleja la inestabilidad del empleo local, sino que también ejerce presión sobre los recursos y servicios disponibles en la región.

A pesar de las iniciativas gubernamentales para fomentar el empleo formal y reducir la informalidad, como ferias del empleo y programas de capacitación, los resultados son decepcionantes. La creación de vacantes no siempre se traduce en oportunidades accesibles para todos. Aunque hay alrededor de 480 vacantes disponibles en La Paz y cerca de 600 en Los Cabos, muchos aspirantes no cumplen con los requisitos o simplemente no tienen acceso a la información necesaria para postularse.

Los salarios también son un tema crítico. El salario promedio mensual en BCS es de 11 mil 400 pesos, cifra que puede parecer atractiva, pero que no garantiza una calidad de vida digna. La inflación y el aumento en el costo de vida han erosionado el poder adquisitivo de muchas familias, dejando a muchos trabajadores luchando por llegar a fin de mes.

La desigualdad social se manifiesta claramente en el acceso al empleo. Las mujeres representan el 40.5% de la fuerza laboral, pero enfrentan barreras significativas para acceder a puestos bien remunerados y estables. La falta de políticas efectivas que promuevan la igualdad laboral agrava esta situación.

El impacto del desempleo va más allá del ámbito económico; afecta también la salud mental y emocional de la población. La incertidumbre económica genera ansiedad y estrés entre quienes buscan trabajo o quienes están atrapados en empleos informales, sin futuro claro. Esta situación no sólo afecta a los individuos, sino también a sus familias y comunidades.

El panorama del desempleo en BCS es un reflejo complejo de oportunidades y desafíos. Aunque las cifras oficiales sugieren un estado saludable en términos laborales, la realidad detrás de esos números revela una lucha constante por parte de muchos sudcalifornianos por encontrar empleos dignos y estables. La informalidad laboral sigue siendo un obstáculo significativo que debe ser abordado con urgencia.

Para enfrentar estos retos, es fundamental que tanto el gobierno como el sector privado trabajen juntos para crear políticas inclusivas que promuevan no sólo la generación de empleos, sino también su formalización y estabilidad. La inversión en educación y capacitación será crucial para preparar a las nuevas generaciones para un mercado laboral cambiante y exigente.

BCS necesita mirar más allá de las estadísticas optimistas sobre el desempleo. Es imperativo reconocer las realidades complejas del mercado laboral y trabajar hacia soluciones sostenibles que beneficien a todos sus habitantes. La lucha por empleos dignos debe ser una prioridad si se desea construir un futuro donde cada sudcaliforniano tenga acceso a oportunidades laborales satisfactorias y equitativas.

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AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, ésto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.

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José Luis Cortés

Escritor, filósofo, maestro de inglés y entrenador de liderazgo. Nació en Morelia, Michoacán, el 18 de mayo de 1973. Estudió Contaduría en la UABC de Tijuana, BC, y se certificó en Ontario, California, EEUU, como entrenador de liderazgo y como maestro de inglés. Soñador despierto toda la vida.

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