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El extraño pulpo que están encontrando en playas mexicanas

FOTO: Internet.

SudcaliCiencia

Por Marián Camacho

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). Desde la primera entrevista que tuve con la Maestra en Ciencias Nefertiti T. Roldán Wong acerca de “¿Qué hacer si ves un pulpo o un calamar, vivo o muerto, en playas mexicanas?”, supe que el proyecto de Ciencia Ciudadana con Cefalópodos en México traería muchas sorpresas. Esto me fue evidente, porque al tener la participación de muchos ciudadanos reportando lo que ven, a través del grupo de Facebook Avistamiento de Cefalópodos México, era cuestión de tiempo que alguien encontrara un aspecto novedoso para la ciencia que difícilmente puede ser descubierto por un reducido grupo de científicos en las salidas específicas que se hacen para ello.

Así, cuando me enteré de los varios reportes acerca de un extraño pulpo que está siendo encontrado en playas mexicanas, no dudé en volver a reunirme con Nefertiti para que brindara más detalles al respecto a los queridos lectores de esta columna de Sudcaliciencia.

FOTOS: Cortesía.

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Lo primero que le pregunté a Nefertiti fue sobre cómo comenzaron estas notificaciones sobre este pulpo tan diferente. “Después de solo unos meses de haber comenzado el proyecto de Ciencia Ciudadana con Cefalópodos en México, ya hemos recibido muchas fotografías y videos interesantes. Sin embargo, hace unos días recibimos lo que podría ser uno de los reportes más interesantes hasta el momento: un extraño pulpo-calamar moribundo en el malecón de La Paz.” –me platica ella.

“Algunos capitanes y prestadores de servicios turísticos que se encontraban en el malecón observaron este raro pulpo-calamar -como ellos lo llamaron – acercarse lentamente a la orilla. Aunque todos ellos son hombres de mar y han navegado durante la mayor parte de su vida, jamás habían visto algo similar; y es que este pulpo tenía una apariencia muy extraña, se movía muy lentamente cerca de la superficie, era de color rojo-violeta intenso y tenía un manto de piel largo que flotaba como tela. Cuando una persona se aventuró a tocarlo, comenzó a soltar pedazos de su piel por todas partes, ´parecía que producía piel por montones´- mencionó alguien.”, relata con emoción la Maestra en Ciencias.

“Afortunadamente, una de las personas en el lugar sabía que nuestro equipo se dedica a la investigación de pulpos, por lo que inmediatamente nos contactó para que rescatáramos o investigáramos al animal. Inmediatamente me dirigí al sitio y al llegar me di cuenta de que mis sospechas eran ciertas, se trataba de un pulpo manta o pulpo de velo violeta, un tipo de pulpo bastante raro de encontrar y del cual aún se sabe muy poco ¡este es un hallazgo único! -pensé emocionada. Coloqué al animal en una cubeta para examinarlo y fotografiarlo, pero ya se encontraba muy débil, se movía muy poco y cambiaba de color abruptamente por momentos. Inmediatamente, comenzaron a llegar más personas curiosas y se escuchaban muchas preguntas.”, recuerda Nefer, como cariñosamente conocemos a esta científica.

 

Acto seguido, le pido a Nefer si es posible nos comparta las preguntas que surgieron en la gente que estaba ese día del hallazgo en el malecón y las respuestas que pueden satisfacer esa curiosidad innata que tenemos los seres humanos al encontrarnos con algo desconocido. Así, este es un resumen de lo que se habló en aquella ocasión:

¿Es un pulpo o un calamar? ¿Es una mutación o un híbrido?

No, no es una mutación o un híbrido entre calamar y pulpo. Los pulpos manta son cefalópodos ya conocidos y descritos por la ciencia, pertenecen al grupo de los octópodos (tienen ocho brazos), por lo que están más emparentados con los pulpos que con los calamares. Existen cuatro especies en el mundo, todas dentro de la familia Tremoctopodidae y el género Tremoctopus.

¿Por qué nunca habíamos visto uno?

Estos pulpos son difíciles de encontrar. De hecho, existen muy pocos videos y fotos de ellos vivos y solo algunos reportes de observaciones en las costas de México. Esto se debe a que son pulpos pelágicos, es decir que viven nadando en mar abierto, nunca tocan el fondo y rara vez se acercan a la orilla como otros pulpos. Además, tienden a evadir a cualquier animal o humano que se encuentre cerca, ya que para ellos somos posibles depredadores.

¿Por qué soltaba pedazos de piel?

Estos pulpos tienen este característico manto o velo de piel (de ahí su nombre), el cual extienden cuando se sienten amenazados para aparentar ser más grandes y espantar a su atacante. Si esto no funciona, también pueden soltar su velo completo o en partes para distraer a sus depredadores y escapar. Sin embargo, solo las hembras tienen estas características, llegando a medir dos metros de longitud; mientras que los machos no tienen velo y apenas miden unos cuantos centímetros.

¿Son peligrosos o venenosos?

Algo inusual de estos pulpos es que son inmunes a las células urticantes de las medusas conocidas como fragatas portuguesas, las cuales son sumamente venenosas para el ser humano. Gracias a esto, ellos pueden arrancar tentáculos de estas medusas y pegarlos a sus brazos para usarlos como defensa contra cualquier atacante. Aunque este mecanismo de defensa no es muy común, les recomendamos que, si algún día se encuentran con un Tremoctopus, eviten tocar sus brazos para evitar cualquier posible riesgo.

¿Se puede comer?

Al igual que otros pulpos, su cuerpo está compuesto principalmente por músculo y puede ser consumido por el ser humano. Sin embargo, hay que considerar el peligro mencionado anteriormente y el hecho de que algunas especies son más gelatinosas y posiblemente no tengan la misma consistencia, sabor o valor nutricional característico de otros pulpos.

¿Por qué se está muriendo? ¿Por qué llegó a la orilla? ¿Se puede recuperar y liberar?

La mayoría de las especies de pulpo se reproducen una sola vez en su vida, después de lo cual agotan todas sus reservas energéticas y pasan por un proceso llamado senescencia. Durante la senescencia, presentan debilidad muscular, daños en sus tejidos, poca movilidad y energía. Es posible que el pulpo manta encontrado en el malecón estuviera pasando por este proceso y haya sido arrastrado por las corrientes hasta la orilla, razón por la cual murió poco tiempo después de ser encontrado y no tenía posibilidades de recuperarse. Sin embargo, estamos examinando el cuerpo para verificar si ya se había reproducido y así confirmar que ésta fuera la causa de su muerte.

Finalmente, Nefertiti me platicó que “posterior a este reporte en La Paz, nos han compartido numerosas noticias de pulpos manta varándose en distintas playas mexicanas e incluso, en otras partes del mundo como en Estados Unidos. Además, existen algunos reportes de varamientos cerca de La Paz en años anteriores. Esto nos ha llevado a preguntarnos ¿qué está pasando? ¿por qué se están varando tantos? Es posible que estas especies se estén reproduciendo en esta época del año y por eso están llegando moribundas a las costas, pero también pueden existir otras causas que no conocemos.

Para descubrir esto, necesitamos más reportes y detalles, por lo que pedimos la colaboración de todos ustedes: si llegan a encontrar algún pulpo manta o alguna noticia al respecto, por favor compártanla con nosotros en el grupo de Facebook Avistamiento de Cefalópodos México y, de ser posible, conserven al organismo para que nosotros podamos examinarlo. ¡Este podría ser nuestro primer descubrimiento para el Proyecto de Ciencia Ciudadana con Cefalópodos y todo gracias a ciudadanos como tú!”

Así que, estamos muy contentos de poder traer esta entrevista exclusiva para los lectores de CULCO BCS y ser partícipes de los posibles hallazgos científicos impulsados por ciudadanos curiosos. Al cabo que no nos gusta el mitote, palomilla.

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AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, ésto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.




¿Qué hacer si ves un pulpo o un calamar, vivo o muerto, en playas mexicanas?

FOTOS: Cortesía.

SudcaliCiencia

Por Marián Camacho

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). Los pulpos y calamares son animales marinos que los sudcalifornianos identificamos fácilmente, casi desde que somos niños. No solo porque vivimos rodeados de mar y podemos encontrarlos casualmente en alguna de nuestras muchas visitas a la playa, sino porque forman parte de nuestra cultura gastronómica y, en algunos casos, como en la comunidad de Santa Rosalía, han sido parte fundamental de la actividad pesquera y económica de las comunidades.

Ahora bien, querido lector, es interesante que usted sepa que los pulpos y calamares, junto con otros organismos similares como sepias y nautilus, han sido clasificados por los científicos dentro de un grupo de moluscos conocido como Cefalópoda. Y no solo esto, los científicos especialistas en la vida de estos animales marinos han descubierto aspectos extraordinarios sobre su historia de vida –algunos son referidos como fósiles vivientes– y su comportamiento complejo –se considera que los pulpos son bastante inteligentes. Sin embargo, aún hay muchas preguntas científicas sin resolver acerca de los cefalópodos en las que los ciudadanos podemos involucrarnos para ayudar a resolverlas.

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Al respecto, entrevisté a la Bióloga Marina y Maestra en Ciencias Nefertiti Roldán Wong, quien ha dedicado su trayectoria académica a estudiar diversos aspectos biológicos de los pulpos, como su reproducción y el efecto de la contaminación en su fisiología. Actualmente, Nefertiti es parte fundamental de la iniciativa Ciencia Ciudadana con Cefalópodos, un proyecto internacional que ya llegó a México y está creciendo rápidamente. El carácter alegre y la facilidad para la comunicación pública de la ciencia de Nefer –como cariñosamente la conocemos–, hizo que la conversación fluyera ordenadamente para explicar cómo los ciudadanos podemos apoyar a los científicos a conocer más sobre los cefalópodos.

“Lo primero que quisiera comentar es que los cefalópodos son un grupo de animales conformado por pulpos, calamares, sepias y nautilos. La palabra cefalópodo proviene del griego kephalé, que significa cabeza y podós, que significa pie, lo que en conjunto significa pies en la cabeza y describe bastante bien la apariencia de estos animales” –inicia Nefertiti.

“Seguramente estarás pensando mmm pulpos y calamares ¡qué ricos saben! me caería muy bien una tostadita de pulpo o, mínimo, un burrito de calamar, pero la verdad es que los cefalópodos no solo son una fuente deliciosa y nutritiva de alimento, sino que también son animales muy inteligentes y con un comportamiento tan complejo que ha despertado el interés de numerosos científicos en todo el mundo. Son tan inusuales que la ciencia los usa como modelos de investigación en ciencias biológicas y médicas para entender procesos neurológicos, fisiológicos, inmunológicos, nutricionales, moleculares o incluso el envejecimiento. Además, son indicadores de los efectos del cambio climático, la sobre explotación pesquera, la contaminación, entre otros factores.” –continúa la bióloga marina.

“Asimismo, aunque existen más de 800 especies de cefalópodos distribuidas en todos los océanos del mundo, estudiarlos en su medio natural es muy costoso y complicado porque sus poblaciones son impredecibles y se esconden muy bien de los humanos. Por todas estas razones, el Dr. Gavan Cooke, profesor de la Universidad de Anglia Ruskin, en Reino Unido, tuvo la idea de crear el proyecto Ciencia Ciudadana con Cefalópodos. Este proyecto funciona a través de grupos de Facebook, a los cuales puede unirse cualquier ciudadano y aportar fotografías, videos o información cada vez que se encuentran con algún cefalópodo en su día a día, ya sea nadando, buceando, pescando o desde la playa.” –explica Nefertiti.

Al exponerme esta idea, inmediatamente quise preguntar a Nefer qué tipo de reacciones ha generado en el público una iniciativa con fines científicos que se sustenta en un procedimiento tan sencillo como publicar en Facebook. Inmediatamente, y con mucha emoción, ella me respondió: “¡Esta idea ha resultado un éxito! Todo inició con un grupo en Reino Unido y actualmente cuenta con grupos en 12 países del mundo, incluyendo México. A menos de dos años de su creación, ya cuenta con más de 1,400 miembros y ha recabado más de 2,000 imágenes y videos, los cuales han revelado algunos comportamientos nuevos para la ciencia. ¡Es impresionante lo que se puede lograr gracias al apoyo de los ciudadanos!”

Su respuesta me contagia la emoción y despierta mi interés sobre cuáles son los objetivos específicos que persigue Ciencia Ciudadana con Cefalópodos. “Los objetivos del proyecto son tres: 1) recopilar datos que puedan ser usados para investigación científica, 2) concientizar a los ciudadanos sobre la manera de interactuar con los cefalópodos, y 3) crear un vínculo ciencia-ciudadanía para que más gente conozca a los cefalópodos, cómo se estudian y cómo cuidarlos.” –detalla la Maestra Roldán Wong, y rápidamente prosigue con una invitación: “Si te interesa participar, puedes dar click aquí para ver el grupo Avistamiento de Cefalópodos México, unirte y compartirnos cualquier información que pueda ser útil”.

Finalmente, con la gran sonrisa que caracteriza a esta investigadora, terminamos la entrevista con una sorpresa que tiene Nefertiti para todos los sudcalifornianos acerca de algunos resultados del proyecto de Ciencia Ciudadana con Cefalópodos: “Algunas de las observaciones más interesantes de este proyecto serán presentadas en exposiciones fotográficas en diferentes partes del mundo y, ¡la primera de todas tendrá lugar en México, en la ciudad de La Paz, Baja California Sur! Gracias al apoyo de CICIMAR-IPN, la Asociación de Científicos del Mar de Baja California Sur (ASCIMAR), CIBNOR y la Universidad de Anglia Ruskin, esta exposición contará con más de 40 fotografías de cefalópodos de todo el mundo, así como vídeos, actividades para niños e interacción con científicos expertos.

El evento estará abierto a todo el público, la ENTRADA ES GRATUITA y se presentará en el Malecón de La Paz (9 al 11 de agosto), el Centro Cultural La Paz (12 al 16 de agosto) y el Museo Regional de Antropología e Historia de Baja California Sur (19 al 24 de agosto). ¡Visita esta hermosa exposición para aprender más y apoyar la ciencia en México! ¡Te esperamos!”.

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AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, ésto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.