Radical, Derbez rompe esquemas en un drama conmovedor

Colaboración especial

Alejandro Aguirre Riveros

La Paz, Baja California Sur (BCS). Para ser honestos, acudí al cine con la sospecha de encontrarme frente a una obra más de Eugenio Derbez que me dejaría con el sabor amargo de sus anteriores incursiones. ¿Quién podría culparme? El tráiler insinuaba otro drama educacionista trillado, con el típico Derbez televiso en el papel del maestro moralista. Pero, como en la vida, el cine suele sorprendernos, y Radical no fue la excepción.

Basada en el artículo de Joshua Davis publicado en Wired en 2013, Radical rescata la verdadera historia de la primaria José Urbina López, situada al lado de un basurero en Matamoros, Tamaulipas. En medio de una violencia rampante en el México calderonista del 2011, surge el profesor Sergio Juárez Correa con un enfoque pedagógico revolucionario: permitir que los estudiantes dicten el ritmo y contenido de las clases. De esta manera, el maestro no solo cautiva a sus alumnos, sino que también descubre el talento innato de Paloma Noyola Bueno, interpretada por la joven Jennifer Trejo; quien, a pesar de vivir al lado de un basurero, no abandona su pasión por las matemáticas, demostrando una mente brillante y un futuro prometedor.

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Es así como la cinta nos lleva por una montaña rusa de emociones para mostrar la realidad cruda del México marginado y de un sistema educativo caduco. Derbez se transforma, dejando atrás sus actuaciones caricaturescas, revelando el potencial latente que este junior televiso tiene para ofrecer cuando se combina con un guion sólido y un director que lo sabe guiar.

La dirección de Christopher Zalla, reconocido por su trabajo en La ley y el Orden, brilla con luz propia, manejando a la perfección el balance entre comedia y drama, y sacando lo mejor de un elenco que, sorprendentemente, logra que los jóvenes actores roben la pantalla. Y para los amantes del talento sudcaliforniano, la presencia de Enoc Leaño como el villano de la cinta es simplemente un regalo. Además, cabe destacar cómo la banda sonora, impecablemente seleccionada, te mantiene al filo del asiento, envuelto en un torbellino de emociones, mediante ritmos y sonidos que no se sienten ajenos al universo de la cinta.

Sin embargo, no todo es perfecto en Radical. Algunos personajes secundarios se sienten estereotipados y ciertas tramas podrían haberse pulido más. A pesar de ello, es una película fresca y necesaria, que invita a la reflexión sobre nuestro sistema educativo y la sociedad que lo rodea sin evadir temas que incomodan, pero de los que es necesario hablar: la incertidumbre económica de las nuevas generaciones, la atracción de los jóvenes hacia el crimen organizado, o la imperante necesidad de garantizar el acceso seguro al aborto para todas las mujeres.

Radical se alzó como la Película Favorita del Público en la última edición del festival de cine de Sundance, y no es difícil ver por qué. Es una llamada de atención para aquellos que creen que el cine mexicano más comercial sólo aspira a ser comedias vacías y narco-dramas.

Si estás buscando una película que sea entretenida pero que al mismo tiempo te deje pensando, no busques más: Radical es esa cinta palomera que necesitábamos en la cartelera nacional.

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Los Orígenes del Panteón de Los Sanjuanes: Un Legado Histórico en La Paz

Tierra Incógnita

Sealtiel Enciso Pérez

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). La historia de la ciudad de La Paz, está impregnada de momentos cruciales que marcaron su desarrollo y evolución. Entre estos hitos, uno de los menos conocidos, pero igualmente significativos es la génesis del Panteón de Los Sanjuanes, un lugar que guarda no solo los restos de los difuntos, sino también una parte esencial de la historia de esta comunidad.

Los primeros vestigios de un cementerio en La Paz datan de 1835, cuando el Archivo Eclesiástico de la ciudad comenzó a registrar las defunciones en el cementerio o campo santo del puerto. El primer inhumado fue el español Juan Saralegui, seguido poco después por el Sr. José Manuel Ruiz Carrillo, ex gobernante de la península de Baja California. Sin embargo, la ubicación exacta de este camposanto sigue siendo un enigma, ya que estuvo en servicio solo hasta 1851, antes de ser cerrado debido a problemas de higiene.

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La necesidad de un nuevo cementerio se hizo imperativa con el crecimiento de la ciudad. En 1859, la Ley facultó a la autoridad civil a abrir nuevos panteones fuera de la población, y las autoridades municipales decidieron establecer el nuevo camposanto en el punto cercano al estero noreste de la ciudad, en las manzanas 282 y 284 del plano de la ciudad. Este lugar sería conocido como El Cementerio, en contraposición al anterior, que pasó a ser llamado Panteón Viejo.

El Panteón de Los Sanjuanes, como lo conocemos hoy, comenzó a tomar forma en 1882 cuando se colocó la «piedra fundamental» para su construcción. El contrato para la construcción fue otorgado al Sr. Ángel Fernández, y este nuevo panteón se ubicaría «entre San Juan y El Esterito,» según registró el periódico La Voz de California.

La trágica aparición de la fiebre amarilla en la década de 1880 aceleró la inhumación de restos en Los San Juanes y llevó al abandono de los antiguos cementerios. Posteriormente, se estableció y reglamentó oficialmente como el Panteón Municipal Los Sanjuanes. El 5 de marzo de 1903, se destinó oficialmente el terreno para su construcción, y en 1906 se procedió a la exhumación de los restos del Panteón Viejo y El Cementerio para su reinhumación en Los Sanjuanes.

Con el tiempo, la demanda de espacio en este panteón aumentó, llevando a expansiones en 1946 y 1955, bajo la dirección de la Delegación de Gobierno de La Paz. Desde 1972, los gobiernos municipales han atendido las necesidades de Los Sanjuanes, convirtiéndolo en un lugar digno de remembranza.

El nombre de este panteón, Los Sanjuanes, se originó en las dos primeras tumbas levantadas en honor de los santos Juan Bautista y Juan Evangelista. Así, este lugar se convirtió en un símbolo no solo de descanso eterno, sino también de veneración religiosa.

El Panteón de Los Sanjuanes se erige como un testimonio histórico y cultural de La Paz, una ciudad cuya historia se entrelaza con cada una de las tumbas que descansan en este lugar. En sus terrenos yacen no solo personas, sino también recuerdos que nos conectan con el pasado de esta comunidad en constante evolución.

​Referencia

Ibarra Rivera, Gilberto (2018). La Paz, ciudad y puerto mexicano. Origen, proceso histórico y símbolos emblemáticos. Instituto Sudcaliforniano de Cultura. Archivo Histórico Pablo L. Martínez. La Paz, B.C.S.

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Más Allá del Uniforme: Cadetes, Tortura y Cine. Heroico, la nueva cinta de David Zonana

FOTOS: INTERNET

Colaboración especial

Alejandro Aguirre Riveros

La Paz, Baja California Sur (BCS). En Heroico, aclamada cinta de David Zonana premiada en el Festival de Cine de Guadalajara y el Festival de Cine de Berlín, se nos sumerge en la controvertida institución del ejército mexicano. Mediante la historia de Luis, un joven con raíces indígenas, la trama descubre las adversidades que un cadete experimenta al enfrentar a las filas del Heroico Colegio Militar.

El sistema jerárquico del ejército sirve como escenario para una historia que se sumerge en las sombrías realidades enfrentadas por los nuevos cadetes. Estos jóvenes son sometidos a rituales de iniciación que evocan perturbadoras técnicas de tortura. Aunque se argumenta que estas prácticas pretenden desensibilizar y fortalecer al individuo para las exigencias del servicio militar, no tienen reconocimiento oficial y contrastan enormemente con la imagen que el ejército muestra al público.

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No obstante, pese a su audacia temática, Heroico no está exenta de críticas. La cinta parece estar en deuda con una narrativa más consistente. Aunque está cargada de mensajes potentes y escenas de impacto, tiende a perderse en la ejecución y en ocasiones carece de ritmo. En cuanto a su representación, se percibe un tono condescendiente al tratar temas sensibles, lo que podría deberse a una falta de empatía hacia los personajes. Esta perspectiva superficial puede llevar a la estigmatización y perpetuación de estereotipos.

Por otro lado, hay aspectos que rescatar. La actuación de Fernando Cuautle, quien interpreta el papel antagónico, es notable. Su entrega y matices desafían el cliché y auguran un futuro prometedor en el cine mexicano. Además, la aparición en pantalla del Centro Ceremonial Otomí, utilizado como escenario para representar al Heroico Colegio Militar, otorga una riqueza visual y temática al filme. Esta elección crea un diálogo enriquecido entre el México contemporáneo y su herencia prehispánica.

Sin embargo, tras el aplauso cosechado por Mano de Obra, la ópera prima de Zonana, las expectativas para su nueva cinta eran altas. Aunque Heroico brinda una perspectiva inédita acerca del ejército mexicano, especialmente en un contexto donde la militarización del país se intensifica, persiste la impresión de que la narrativa y desarrollo podrían haberse explorado con mayor profundidad. Heroico actúa como un toque de atención, un espejo que despliega una realidad que muchos preferirían obviar. Representa un paso valiente para Zonana y a pesar de sus imperfecciones, es incuestionable que estamos ante una película que suscita reflexión y un muy necesario debate.

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La Casa de la Juventud de La Paz: Un Legado de Servicio a la Comunidad

Tierra Incógnita

Sealtiel Enciso Pérez

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). En el corazón de La Paz, se encuentra un edificio que ha sido testigo de décadas de desarrollo juvenil y deporte. La Casa de la Juventud de La Paz, conocida hoy como el Instituto Sudcaliforniano de la Juventud y el Deporte (ISJD), tiene sus raíces en una época en la que la juventud y el deporte eran prioridades en la construcción de una comunidad vibrante.

Fue en noviembre de 1962 cuando el entonces presidente de la República, Lic. Adolfo López Mateos, inauguró estas instalaciones y las entregó al pueblo de La Paz. El C. Víctor M. Sandoval fue el delegado fundador que desempeñó un papel crucial en la creación de este espacio destinado a la juventud sudcaliforniana.

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En sus primeros años, la Casa de la Juventud estuvo bajo la dependencia del Instituto Nacional de la Juventud Mexicana (INJUVE) y se convirtió en un centro de actividad y desarrollo para los jóvenes de la región. Ofreció una amplia variedad de servicios, desde la práctica de la natación hasta el atletismo en todas sus ramas, incluyendo pista y campo, así como una diversidad de deportes que iban desde el béisbol y el fútbol hasta el voleibol y el tenis, entre otros.

Pero la Casa de la Juventud no sólo promovía el deporte; también era un centro de formación artística y actoral. Aquí, los jóvenes podían participar en actividades como pintura, dibujo, ballet, danza folklórica, declamación, oratoria y teatro experimental. Además, se ofrecían oportunidades de educación tecnológica en áreas como mecanografía, electricidad, industria del vestido e idioma inglés.

Las instalaciones de la Casa de la Juventud estaban diseñadas para satisfacer todas las necesidades de los jóvenes, con un gimnasio, auditorio, piscina, biblioteca, salón de baile, aulas y campos deportivos, entre otros servicios principales. En 1973, se dedicó el auditorio en honor a uno de los más grandes intelectuales de la región, convirtiéndose en la Sala Manuel Torre Iglesias, y posteriormente en el Teatro Manuel Torre Iglesias.

A lo largo de los años, la Casa de la Juventud se adaptó a las políticas gubernamentales en constante evolución y pasó por diferentes asignaciones y siglas de organismos federales, como INJUVE y CREA. El gobierno del estado de Baja California Sur asumió el control de las instalaciones y la responsabilidad de las funciones educativas y deportivas. Finalmente, en 1989, se le otorgó oficialmente la categoría de organismo estatal bajo el nombre de Instituto de la Juventud y el Deporte.

FOTO: INSDUE

En 1999, las instalaciones se convirtieron en sede de las oficinas del Instituto Sudcaliforniano de la Juventud y el Deporte (ISJD), continuando su compromiso con la juventud y el deporte de la región. A lo largo de los años, el ISJD ha tenido varios directores generales que han trabajado incansablemente para promover el desarrollo juvenil y deportivo en Baja California Sur.

Uno de los anexos más destacados de la Casa de la Juventud es el Salón de la Fama del Deportista Sudcaliforniano, que se inauguró en 1993. Este espacio rinde homenaje a los deportistas más destacados de la región y destaca sus logros en el ámbito nacional e internacional..

La Casa de la Juventud de La Paz, con su rica historia y contribución a la comunidad, es un testimonio vivo del compromiso con la juventud y el deporte en Baja California Sur. A lo largo de los años, ha evolucionado y se ha adaptado, pero su misión de servir a la juventud y promover el deporte sigue siendo una parte integral de su legado.

 

Referencia

Ibarra Rivera, Gilberto (2018). La Paz, ciudad y puerto mexicano. Origen, proceso histórico y símbolos emblemáticos. Instituto Sudcaliforniano de Cultura. Archivo Histórico Pablo L. Martínez. La Paz, B.C.S.

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Premios Ariel: Una Ventana Al Contraste y Controversia del Cine Mexicano

Colaboración especial

Alejandro Aguirre Riveros

La Paz, Baja California Sur (BCS). Cuando el foco rojo del Teatro Degollado en Guadalajara, Jalisco, se iluminó para señalar el inicio de la 65ª entrega de los Premios Ariel, estábamos ya ante un escenario histórico. No es una elección baladí que la ceremonia abandonara por primera vez su guarida en la Ciudad de México. Debido a una crisis económica que asoló a la Academia Mexicana de las Artes y las Ciencias Cinematográficas, el gobierno de Guadalajara emergió como un patrocinador providencial, ofreciendo el teatro y otros apoyos logísticos para que el evento pudiera celebrarse.

Sin embargo, es un secreto a voces que los Arieles, a diferencia de sus contrapartes internacionales, raramente incitan a la audiencia a correr a las salas. La Academia trata de paliar este fenómeno con iniciativas como Rumbo al Ariel, funciones diseñadas para acercar las obras nominadas al público, aunque los resultados dejan mucho que desear.

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FOTOS: Internet

Las Directoras y las Historias Reales Dominan la Noche

Las nominaciones de este año fueron particularmente llamativas por la predominancia de directoras talentosas con obras que optan por una aproximación honesta y descarnada a la realidad mexicana: Michelle Garza Cervera (Huesera), Alejandra Márquez Abella (El Norte sobre el Vacío), Teodora Mihai (La Civil) y Lucía Puenzo (La Caída). Estás últimas tres cintas están basadas en hechos reales y abordan con valentía cuestiones de machismo, abuso sexual y desapariciones forzadas.

Las Grandes Ganadoras y las Contradicciones

Alejandro González Iñárritu marcó su regreso al cine mexicano con «Bardo», una obra que, aunque teñida de narcisismo, impresionó con su impecable producción y dirección, haciéndose con ocho premios Ariel, incluidos mejor director y mejor actor. En este escenario, la actuación genuina y apasionada de Daniel Giménez Cacho, galardonado con el Ariel, añadió autenticidad a un relato que a veces oscilaba entre la parábola y la crónica.

Por otro lado, Huesera de Michelle Garza Cervera no defraudó. Nominada a 17 categorías, se alzó con cuatro premios: mejor guion original, mejor maquillaje, mejores efectos especiales y mejor ópera prima. La película es una aguda reflexión sobre la maternidad y las expectativas de género, con actuaciones memorables, particularmente de Natalia Solián.

Sin embargo, fue «El Norte sobre el Vacío», de Alejandra Márquez Abella, la que se llevó el Ariel a Mejor Película, un trabajo contradictorio pero inquisitivo sobre la resistencia de un terrateniente a los cárteles de la droga inspirada por la historia real de Alejo Garza Tamez,

Los Documentales

Dioses de México de Helmut Dosantos y «Teorema del Tiempo» de Andrés Kaiser empataron en la categoría de Mejor Documental, dejando fuera la favorita «Cartas a Distancia» de Juan Carlos Rulfo, que exploraba la pandemia con un toque humano y humorístico.

Controversias y Reflexiones

Esta edición no estuvo exenta de controversias. Películas como La Civil y Bardo obtuvieron premios pese a no cumplir en su inscripción con los tiempos y formalidades exigidos por el reglamento de la Academia, un reflejo de los métodos de votación cuestionables y de los problemas crónicos del cine mexicano: desde la desconexión con el público y la falta de apoyo hasta los ya eternos dilemas de su distribución.

En Resumen

La 65ª entrega de los Premios Ariel es un microcosmos de la industria cinematográfica mexicana: plagada de talento y posibilidad, pero también de contradicciones y desafíos. Con todos los obstáculos, los cineastas continúan trabajando con los recursos y oportunidades que tienen. Casi la mayoría de estas películas están disponibles en plataformas de streaming, así que, querido lector, le invito a sumergirse en estos títulos que, a pesar de sus imperfecciones, representan un importante hito en la historia del cine mexicano.

 

— *Un brindis al cine que nos duele, pero también al que nos da esperanzas.*

 

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