El Triunfo de la Cruz: La Epopeya Marítima del Padre Juan de Ugarte en Baja California

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Tierra Incógnita

Sealtiel Enciso Pérez

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). En la vastedad inhóspita de la península de California, el Padre Juan de Ugarte, misionero incansable, llevó a cabo una gesta que desafió los límites de lo posible: la construcción de la Balandra El Triunfo de la Cruz. Este relato de valentía y fe se entrelaza con la perseverancia del Padre Ugarte, quien, tras atravesar toda California, se enfrentó a un nuevo desafío: la pérdida del barco que transportaba los vitales suministros para las misiones.

En medio de la urgencia y la necesidad en el Presidio, entre indígenas y misioneros, el Padre Ugarte se propuso la tarea aparentemente imposible de construir un nuevo barco en una tierra donde cada clavo y tabla eran tesoros escasos. Aunque la gente dudaba de la viabilidad de la empresa, el Padre Ugarte, conocido como el hombre que conseguía lo que intentaba, aceptó el desafío con la firme convicción de que nada era imposible para él con la ayuda divina.

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La historia cuenta que incluso un hombre se ofreció a ser quemado con las astillas del barco que Ugarte construiría, tan grande parecía la locura de la empresa. La falta de herramientas, materiales y hasta un maestro carpintero no disuadió al Padre Ugarte. Su fe animosa y su deseo ferviente de difundir la fe y la religión católica en la región lo impulsaron a emprender esta tarea monumental.

Lo más destacado de este episodio fue la construcción de la embarcación en una tierra desprovista de recursos marítimos, donde cada paso parecía un desafío insuperable. El Padre Ugarte, mostrando una humildad ejemplar, se unció a un indígena para tirar del arado, imitando así a San Francisco de Borja. Sin madera, hierro, instrumentos o artesanos, el Padre Ugarte, a la manera de los héroes jesuitas, se convirtió en maestro, carpintero, herrero y todo lo que la construcción del barco requería.

A pesar de los innumerables obstáculos, el Padre Ugarte, apoyado en su fe inquebrantable, logró lo que parecía imposible. Con una determinación admirable, juntó hierro, madera y bestias de carga, abriéndose camino por cerros inaccesibles.

Manejando el hacha y cortando árboles, conocidos en la actualidad como guéribos, de las intrincadas hondonadas de la sierra de Guadalupe, Ugarte llevó a cabo una hazaña que dejó perplejos a aquellos que observaban la aparentemente imposible tarea.

El esfuerzo extraordinario del Padre Ugarte no se limitó a la construcción del barco.

Con un costo personal de tres mil pesos, equivalentes a su trabajo en la misión, asumió deudas para completar la obra. Incluso compartió el último rastro de chocolate con los aprendices, evidenciando la magnitud de sus sacrificios.

Esta nave, bautizada como El Triunfo de la Cruz y botada para hacer su travesía inaugural el 14 de noviembre de 1719, se convirtió en un testimonio de la capacidad del Padre Ugarte para superar adversidades. La embarcación, que desafiaba las predicciones más pesimistas, se convirtió en un símbolo duradero de triunfo sobre las tormentas, navegando exitosamente durante doce años y realizando sesenta viajes en medio de tempestades y peligros marítimos.

La construcción de El Triunfo de la Cruz no solo fue un logro técnico y marítimo, sino un reflejo del espíritu intrépido y la fe inquebrantable del Padre Juan de Ugarte. Su legado, plasmado en la madera de esa balandra, sigue siendo una inspiración en la historia marítima de Baja California, recordándonos que, con fe y determinación, los imposibles pueden convertirse en triunfos duraderos.

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AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, ésto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.
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Tierra Incógnita

Sealtiel Enciso Pérez

Profesor de Educación Primaria, Licenciado en Educación Especial y Maestro en Ciencias de la Educación. Labora en la Secretaría de Educación Pública y comparte su tiempo con su pasión por la historia de la California del Sur. Administra el grupo de Facebook “Conociendo Baja California Sur”. Nació el 22 de septiembre de 1969 en Puerto Vallarta, Jalisco, pero radica en Sudcalifornia desde hace 44 años. Actualmente, es Director de la Unidad de Servicios de Apoyo a la Educación Regular No. 17 y Maestro de Comunicación del Centro de Atención Múltiple “Gilberto Vega Martínez” en La Paz. Escribió la antología (Ebook) “Piratas, Corsarios y Filibusteros en la Antigua California”. Mención Honorífica en el VII Premio Estatal de Periodismo “Jesús Chávez Jiménez”, en Entrevista, por su trabajo “Graciela Tiburcio Pintos, la leyenda de la biología de las tortugas”.

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