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Bajo la piel, de Michel Faber

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El librero

Por Ramón Cuéllar Márquez

La Paz, Baja California Sur (BCS). El trabajo literario de Michel Faber (La Haya, Holanda, 1960) no es nada fácil de clasificar: combina elementos de la ciencia ficción, el terror y el thriller, que ejecuta con solvencia y una profundidad extraña, aspecto que le ha valido el aplauso unánime de la crítica. En el caso de la novela que hoy nos ocupa, Bajo la piel (Under The Skin, UK, 2000) sin duda le dio el renombre internacional que merecía y que lo colocó como uno de los más importantes de comienzos del siglo XXI y de milenio.

La historia de este escritor junto a sus padres es de constantes cambios geográficos que le permitieron conocer Australia desde 1967, donde estudió estudios básicos en varios suburbios de Melbourne, y que luego continuarían hasta la universidad. En esa época tuvo acceso a la lengua holandesa, a la filosofía, la retórica, el inglés y la literatura, graduándose en 1980. Obtuvo sus primeros ingresos como limpiador, antes de que se dedicara a la enfermería en Marrickville, además de hospitales en Sidney.

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Hacia 1993, con su segundo matrimonio se trasladó a Escocia, donde aún viven y donde tienen una granja en las Tierras Altas. Su actividad literaria la inició a los catorce años; fue Eva —su segunda esposa—, quien le sugirió presentar sus escritos a concursos literarios, lo cual le permitió darse a conocer. Una de las anécdotas de su popularidad y del aprecio que le tienen, es que, a pesar de haber nacido en Holanda, cuando va a Australia lo reciben como australiano y cuando está en Escocia lo reciben como uno de los suyos.

Publicó el libro de cuentos Some Rain Must Fall en 1998 y luego en el 2000 su novela Under The Skin (Bajo la piel). Y precisamente Bajo la piel, como dijimos, es el libro que le dio la fama, logrando incluso que la hicieran película en 2013, del director Jonathan Glazer, e interpretada por Scarlett Johansson, aunque se aleja bastante del relato Michel Faber, pero que logra un efecto de opresión y angustia debido a la atmósfera oscura con que fue filmada; se trata incluso de una de las películas más perturbadoras de la década de 2010.

La trama de la novela es una interesante mirada a un ente que se hace pasar por mujer, llamada Isserley, que va solitaria por las carreteras levantando hombres fuertes, con cero grasas, que piden los lleven a algún punto, cuyos destinos fatídicos se nos revelan a lo largo del relato. La lectura nos va conduciendo junto a la mujer y vemos cómo envuelve a los hombres, quienes atraídos por su aspecto sensual aceptan que los lleve a donde van, sin saber del peligro que corren.

Ella es una mujer pequeña con senos grandes y bien formados, con gafas que cubren su rostro y escotes amplios que hacen que no se le preste atención más allá de la cara y las manos, pues ahí es donde realmente podemos darnos cuenta de que es una criatura que no es de este mundo, pues ha sido sometida a cirugías dolorosas para darle aspecto humanoide. Así, a lo largo del libro descubrimos que los seres que acompañan a Isserley son más que especímenes terroríficos, antes bien una sociedad estructurada casi como la humana y con emociones que por momentos rayan en lo cotidiano, semejantes a las nuestras. Se trata de una historia que no podemos soltar, que linda entre la conspiración, la paranoia y nos somete a cuestionamientos sobre nuestra propia naturaleza existencial.

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