La Reina Isabel II en La Paz. En busca del origen de la perla de la Corona

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Fotos principales: don Carlos Reyes.

Tierra Incógnita

Por Sealtiel Enciso Pérez

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). Una soleada mañana del 22 de febrero del año de 1983, llegaron a la bahía de La Paz, dos grandes acorazados de la marina mexicana, el “Zamora” y el “Ocampo”. Traían como misión primordial salvaguardar la integridad de dos distinguidos visitantes que venían desde Europa, específicamente del país de Reino Unido, y que estaban de visita de cortesía e investigación en nuestro puerto. Estos huéspedes eran Elizabeth Alexandra Mary Windsor, conocida oficialmente como Isabel II, y su consorte Felipe de Edimburgo. Ambos viajaban en el buque real de nombre “Britannia”.

Desde hacía varios días, la pareja real realizaba un viaje diplomático por nuestras costas y al mismo tiempo lo combinaban con el placer del descanso y la desestresada vida en el mar. Venían de visitar las playas de Acapulco, Lázaro Cárdenas y Puerto Vallarta. Sin embargo el punto más importante de visita para la Reina, era nuestra ciudad, esto lo aseguran personas que acompañaron a la comitiva que le dio la bienvenida.

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Isabel II y su esposo Felipe, fueron trasladados desde el buque real hasta el muelle turístico, desembarcando a las 10:30 de la mañana. Cabe hacer mención que entre los rápidos preparativos para esta visita, el día anterior se mandó restaurar el muelle cambiando los maderos y colocándole en su extremo una plataforma flotante. El comité de bienvenida estuvo encabezado por el entonces gobernador de nuestra entidad, Alberto Alvarado Arámburo y su esposa María Teresa Soto. Ese día, desde horas tempranas, se había hecho una convocatoria por radio, a toda la ciudadanía de La Paz para que acudiéramos masivamente a la explanada del kiosco del malecón y le diéramos la bienvenida a estos distinguidos visitantes. Incluso se concedió permiso especial a los alumnos de las escuelas secundarias y preparatorias para acudir a este evento.

Inmediatamente después de intercambiados los saludos de cortesía, el Gobernador invitó a la reina Isabel II para que develara una placa alusiva a su visita a esta ciudad, y al mismo tiempo se le imponía el nombre de “Muelle de la Reina” al sitio donde había desembarcado momentos antes. La placa duró por espacio de 30 años en este sitio, pero lamentablemente, durante obras de mantenimiento a la explanada del kiosco del malecón, se sospecha que trabajadores de la empresa concesionada, sustrajeron indebidamente la placa sin que hasta el momento se sepa su paradero.

Acto seguido, se trasladó a los visitantes a la centenaria Catedral de Nuestra Señora de La PazAirapí, con el propósito de que conocieran de primera mano este hermoso sitio y se deleitaran con su arquitectura y obras exhibidas. Posteriormente las autoridades se desplazaron a la Casa Presidencial de El Caimancito, en donde ofrecieron un banquete con riquísimos platillos sudcalifornianos. Un momento emotivo ocurrió cuando se le entregó a la Reina una artesanía donde aparecía el escudo real realizado en concha. La homenajeada en gesto de retribución prometió colocar este regalo en un sitio especial dentro del barco real. El artesano encargado de elaborar este regalo fue el señor Vicente Moreno, conocido artista local.

Finalizada la comida, los huéspedes se despidieron de todas aquellas amables personas que los habían atendido tan espléndidamente y sobre todo de Alvarado Arámburo y su distinguida esposa. Fueron conducidos de regreso al muelle donde los esperaba la lancha que los llevó al “Britannia”.

El viaje de los reyes de Inglaterra prosiguió por nuestras tierras de la California del Sur hasta el día siguiente ya que fueron de visita a la laguna Ojo de liebre, en donde pudieron observar a las maravillosas ballenas grises que año con año vienen a visitarnos. Años después, la Reina comentaría a uno de los presidentes de México que acudió a su país, que en ese sitio “casi pudo tocar a las ballenas”.

Cuando inicié el relato mencioné que también venían los monarcas en visita de investigación. Y es que precisamente, la Reina Isabel II, tiene en su poder una corona, que fue legada por su bisabuelo Eduardo VII, en la que se encuentra engarzada una enorme perla, de grandísimo valor, y que fue encontrada dentro de una madreperla en la isla Espíritu Santo. El buque de la Reina, antes de llegar a la ensenada de La Paz, pasó frente a las islas Cerralvo y Espíritu Santo, en donde pudo apreciar los sitios donde 100 años antes se extraía la madreperla así como su preciosísimo producto, y de donde se obtuvo el tesoro que hoy forma parte de su cuantiosa fortuna.

El origen de la perla en comento, se relata de la siguiente manera: En el año de 1883, los buzos Juan Vacaseque Calderón y Antonio Cervera, ambos trabajadores de la empresa armadora “González y Ruffo, S.A.” sacaron de un sitio de extracción cercano a la Isla Espíritu Santo, una perla del tamaño de “un limón regular”, de una belleza singular y de un oriente extraordinario. Al ser entregada a los dueños de la empresa le ponen el nombre de “Carmenaida”, en honor a las Sras. Carmen y Adelaida Ruffo Santa Cruz. Se dice que durante varios años estuvo en el aparador de la tienda “Ruffo Hermanos” para deleite de los habitantes de esta ciudad así como de los visitantes.

Durante uno de los constantes viajes del Sr. Antonio Ruffo Santa Cruz a la ciudad de San Francisco en E.U.A., mostró la perla al embajador de reino unido en ese país, Sir Anthony Fein, el cual quedó altamente impresionado por la belleza de aquella joya. Intentó comprársela sin éxito al Sr. Ruffo Santa Cruz, el cual en un acto de gran desprendimiento decide regalársela al Rey Eduardo VII por intermedio de su embajador. Según cuenta el relato, la corona que actualmente porta la Reina Isabel II tiene engarzada en su parte frontal la mencionada perla, la cual fue rebautizada con el nombre de “Great Lemon”.

Y es así como finalizó este maravilloso viaje en donde la Reina pudo saciar su curiosidad y conocer el origen de esa hermosa perla que porta en su corona, pero mejor aún, pudo conocer y obtener de primera mano el cariño, la amabilidad y el respeto del pueblo sudcaliforniano que le abrió su corazón de par en par.

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Sealtiel Enciso Pérez

Profesor de Educación Primaria, Licenciado en Educación Especial y Maestro en Ciencias de la Educación. Labora en la Secretaría de Educación Pública y comparte su tiempo con su pasión por la historia de la California del Sur. Administra el grupo de Facebook “Conociendo Baja California Sur”. Nació el 22 de septiembre de 1969 en Puerto Vallarta, Jalisco, pero radica en Sudcalifornia desde hace 44 años. Actualmente es Director de la Unidad de Servicios de Apoyo a la Educación Regular No. 17 y Maestro de Comunicación del Centro de Atención Múltiple “Gilberto Vega Martínez” en La Paz. Escribió la antología (Ebook) “Piratas, Corsarios y Filibusteros en la Antigua California”.

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